¿QUE ES LA ENERGÍA REACTIVA?
La energía reactiva no es una energía realmente consumida en la instalación, ya que no produce trabajo útil debido a que su valor medio es nulo. La necesitan algunos receptores (motores, transformadores, maquinas de aire acondicionado, etc...) para crear los campos magnéticos necesarios para llevar a cabo las funciones para las que han sido diseñados. Se dice que estos receptores tienen un comportamiento inductivo; absorven la energía reactiva de la red pero luego la devuelven. Es decir, no consumen energía reactiva aunque si la necesitan para su correcto funcionamiento.
Los usuarios de energía eléctrica pagaran un recargo en sus facturas por la denominada energía reactiva, a modo de "complemento" por energía reactiva que se aplica sobre el importe de la facturación de la potencia, basada en una formula trigonométrica compleja.
Esta energía "extra" provoca una excesiva circulación de corriente elétrica en las instalaciones y en las redes de distribución, causando sobrecargas en las líneas sin producir un trabajo útil, razón por la cual es necesario corregirla para optimizar las instalaciones eléctricas.
¿QUE EQUIPOS PRODUCEN ENERGÍA REACTIVA?
Equipos de iluminación flurorescentes (tubos), equipos electromecánicos (lavadoras, aire acondicionado, motores, etc...) en los cuales una parte de la energía se transforma en frio, luz, movimiento, etc. (energía activa), y la parte restante es requerida para crear campos electromagnéticos para su propio funcionamiento (energía reactiva). Cuanto mayor sea el consumo de energía reactiva, peor será el aprovechamiento de la energía recibida.